PRIMEROS GARABATOS DE LA EXCLUSIÓN
19 de diciembre de 2016
Por Cristian Dodaro
Uno podría pensar que fue sin pensar. Pobre Sendra*, Clarín no debe estar al día en los pagos de sus trabajos, se le deben haber cerrado varios espacios de laburo, lo deben apretar y negociarle el pago a la baja.
Uno puede creer que tal vez Sendra no se dio cuenta, pero ante el bolaceo como laburante trasladó la violencia que sufre hacia otros más débiles que él. Y eso le salió fenómeno. Porque no basta con que naturalice la violencia hacia las mujeres, no. La mujer que sufría el maltrato tenía que ser fea. ¿Y qué significa fea? Para Sendra, laburante al servicio de las grandes corporaciones de manipulación del sentido, fea es pobre, gorda y morocha.
Uno puede pensar que además de explotado por Clarín, Sendra está viejo y cansado, quiere resolver rápido y tiene internalizado el modo en el que durante procesos de exclusión se justifica a los agresores y se culpa a los agredidos. La cosa es que Sendra haya querido o no, reprodujo todos los estereotipos del "cuerpo a marginar"
Un chiste como este, sólo le hace gracia a los varones blancos, garcas y patriarcales que actúan de gerentes y jefes de redacción en Clarín. Se ve que ninguno tuvo prurito alguno en publicar esto. Se ve que envalentonados por la impunidad con la que el diario se apropia de Papel Prensa en una sala de tortura, esto le parece un tema menor.
Pareciera que son los primeros garabatos de la exclusión, que tanto machacar con la violencia por intereses económicos contra Milagro Sala, Dilma, contra Cristina, se empieza a plasmar en el que Clarín intenta naturalizar la violencia cotidiana.
El humor puede corroer las estructuras de dominación. Provocar, desnaturalizar. Pero cuando nos matan a nuestras mamás, nuestras hermanas y compañeras, lo de Sendra y lo del diario que lo publica nos da tristeza, pero no nos paraliza, nos compromete más a seguir construyendo y no desde uno sino desde lo colectivo.
*Para ver la publicacion de Sendra, haz click en la foto para desplegar las imagenes