Netanyahu y el pedido de arresto por crímenes de guerra
25 de mayo de 2024
Karim Kham, fiscal en jefe de la Corte Penal Internacional (CPI) anunció que solicitará órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, así como contra varios líderes de Hamas, por acusaciones de crímenes de guerra. Anunció que se emitan órdenes de arresto contra Netanyahu; el ministro de israelí de Defensa, Yoav Gallant; el líder de Hamas, Yahya Sinwar; Mohammed Masri, jefe militar de Hamas, e Ismail Haniyeh, líder político del grupo.
Por Isabela Arria
Es la primera vez en la historia de la CPI que un jefe de Estado en el poder y un ministro de Defensa en funciones de un país apoyado por otros poderosos estados occidentales, entre ellos Estados Unidos y Gran Bretaña, enfrentan órdenes de arresto.
Como ocurre desde hace décadas, cada vez que se señalan las atrocidades israelíes, las reacciones se centran en descalificar como antisemitismo cualquier crítica, aunque esté plenamente sustentada en los hechos. Esa versión es absurda ante la asimetría de poderes entre la potencia colonial -con aviones de combate, tanques, una provisión inagotable de misiles, además de su arsenal nuclear-, y la resistencia palestina, blandiendo fusiles del siglo pasado, proyectiles artesanales o simples piedras.
Tras conocer la petición para su detención, Netanyahu manifestó su disgusto al equiparar a su país con la organización islamita: ‘‘¿Cómo se atreven a comparar a los monstruos de Hamas con el ejército de Israel, el más moral del mundo?’, dijo. No importa qué insinúe el fiscal, Israel y Hamas no son equiparables de ninguna manera, sostuvo, por su parte, Joe Biden, y Blinken remató que Hamas es una organización terrorista violenta que llevó a cabo la peor masacre de judíos desde el Holocausto y todavía mantiene como rehenes a decenas de inocentes
taques contra una población civil y cometer exterminio, en tanto que a los miembros de Hamas se les imputa exterminio, así como violación y otras formas de agresión sexual y toma de rehenes como crimen de guerra. Si los jueces conceden las solicitudes de Khan, los mencionados quedarían expuestos al riesgo de captura en los 124 países en los que la CPI tiene jurisdicción.
Aún cuando ni Israel ni Estados Unidos, su mayor aliado, forman parte del Estatuto de Roma, el tratado en que se constituyó la Corte, Netanyahu no necesita salir de su país para enfrentar cargos penales: dentro de Israel se le han abierto expedientes por corrupción, y sus opositores señalan el deseo de sustraerse a la acción de la justicia como la principal motivación del empeño con que se aferra al poder.
La defensa ensayada por Netanyahu, el presidente estadunidense, Joe Biden ,y su secretario de Estado, Antony Blinken, confirma la exactitud de la postura del fiscal.. Las afirmaciones de Ntenayahu, Biden y Blinken desnudan el fundamento del genocidio perpetrado por Tel Aviv con el apoyo incondicional de Washington: la doctrina racista según la cual las vidas palestinas tienen un valor incomparablemente menor, e incluso nulo, por lo que la aniquilación de palestinos no puede equipararse a la de ciudadanos israelíes.
Desde Ginebra señalan que si el asesinato de mil 250 de israelíes convierte a los integrantes de Hamas en monstruos y terroristas violentos, ¿cómo puede calificarse a quienes han masacrado a 35 mil palestinos, herido a 79 mil, matado de hambre a un número indeterminado, arrasado 175 mil edificios y obligado a más de un millón de personas a abandonar sus hogares?
Si el secuestro de 250 personas por parte del grupo armado gazatí es un crimen injustificable, ¿qué puede decirse de los sucesivos gobernantes de Israel, que mantienen secuestrada a toda una nación desde 1948?
El genocidio continúa
Israel lanzó un nuevo ataque en el centro de Gaza ayer, bombardeó poblados en el norte de la franja e indicó que intenta ampliar su operación militar en Rafah, pese a advertencias estadounidenses sobre el riesgo de bajas masivas en la ciudad sureña. Al menos 23 personas han muerto en los combates más recientes, y residentes cuentan que las batallas fueron intensas en Jabaliya, en el norte del enclave palestino.
Tanques israelíes también realizaron una incursión limitada en las zonas de Wadi Salqa y Karara, cerca de Deir Balah, ciudad del centro de Gaza en la que las fuerzas israelíes no han entrado durante los más de siete meses de guerra, según residentes locales.
La acción de la Corte ocurre después de varias semanas en que los más leales partidarios de Israel lo han llamado a la prudencia en su guerra en Gaza, en particular respecto a la invasión de la ciudad sureña de Rafah, a la que más de un millón de palestinos huyeron para evitar quedar atrapados en las primeras etapas de los ataques israelíes.
Los cargos contra Netanyahu y Gallant, dos de los tres miembros principales del gabinete de guerra israelí, incluyen “causar hambre a civiles como método de guerra… dirigir intencionalmente ataques contra una población civil… causar a propósito gran sufrimiento… persecución como crimen de lesa humanidad… (y) exterminio y/o asesinato”.
Un colegio de cinco jueces de la Corte considerará la solicitud de Khan para emitir las órdenes de arresto. Si el colegio considera apropiado acceder a la petición, Netanyahu estaría en compañía del presidente ruso Vladimir Putin, quien actualmente se ve impedido de viajar a cualquiera de los 124 países signatarios de la CPI, después de que se libró una orden de arresto en su contra por la invasión en gran escala de Ucrania.
El “mundo libre”
Seré claro: no importa qué insinúe el fiscal, Israel y Hamas no son equiparables de ninguna manera, sostuvo Joe Biden en un comunicado. Siempre estaremos junto a Israel contra las amenazas a su seguridad, añadió.
El presidente israelí, Isaac Herzog, expresó: esperamos que todos los líderes del mundo libre condenen de inmediato este paso y lo rechacen con firmeza. Mientras, Yair Lapid, líder de la oposición israelí, consideró un desastre la decisión del fiscal de la CPI. En un discurso ante su facción parlamentaria, dijo que espera que el Congreso estadunidense se reúna y condene la medida.
Israel, como todos los estados, tiene derecho a tomar medidas para defender a su población, indica la declaración del fiscal Khan. “Ese derecho, sin embargo, no libera a Israel ni a ningún Estado de la obligación de cumplir con el derecho humanitario internacional.
Más de 35 mil 562 palestinos han perecido y 79 mil 652 han sido heridos durante la guerra de Israel en Gaza, según el recuento más reciente del ministerio local de Salud, el cual sostiene que la mayoría de las bajas son de mujeres y niños.
“Al margen de cualesquier objetivos militares que pueda tener, los medios que Israel ha elegido para conseguirlos en Gaza –es decir, causar intencionalmente mortandad, inanición, gran sufrimiento y heridas graves al cuerpo o la salud de la población civil– son criminales”.
Todos los cargos contra Sinwar, Haniyeh y Masri se refieren al ataque de Hamas en suelo israelí el 7 de octubre y al presunto maltrato de los rehenes llevados a Gaza después del asalto. Israel sostiene que unas mil 200 personas fueron asesinadas durante el ataque, y 245 fueron tomadas en rehenes, de las cuales 120 siguen en Gaza.
Un alto mando de Hamas declaró que el fiscal equipara a la víctima con el verdugo. También hubo apoyo a la decisión del fiscal. La renombrada abogada de derechos humanos Amal Clooney, quien encabezó a un grupo de expertos en derecho internacional convocado por el fiscal, publicó al mismo tiempo las conclusiones del grupo, las cuales, señaló, respaldan por unanimidad la decisión.
El fallo del fiscal de la Corte Penal Internacional da sustento al establecimiento de sanciones emitidas por Naciones Unidas que lleven a Israel a dejar atrás el colonialismo genocida y a negociar la única salida aceptable: la construcción de un Estado palestino soberano en conformidad con la legalidad internacional en Gaza, la totalidad de Cisjordania y con capital en la Jerusalén Oriental.