Por Walter Formento *

El presidente del Banco Central en una demostración de independencia (poder propio) frente al Gobierno de Macri y su gabinete de ministros, no redujo significativamente las tasas de interés de referencia. Los intereses financieros globales que hacen negocios con las Lebacs (timba financiera del 28%) y transfieren, se quedan y acumulan riquezas que se producen en los otros sectores de la economía real siguen siendo los ganadores de la política del Macrismo, siguen siendo el poder real en el gobierno de Macri, siguen siendo los que imponen las condiciones para el resto de los Argentinos.

La apuesta del Macrismo, a través de su jefe de gabinete, a que dejen de ganar los Sres. Capitalistas de los negocios financieros en Lebacs y empiecen a ganar los Capitalistas de los negocios en la economía real, ha perdido una nueva pulseada de poder. Stuzzeneger (Cavallo/Redrado) redujo la tasa de 28,75 a 28%, Nada!!!, solo lo necesario para demostrar que el poder en Argentina lo respalda a él y no a Macri. La demostración de poder, es decir de independencia de facto del Banco Central, de los jugadores financieros globales (de facto) frente al Gobierno electo muestra la profundización de la crisis de gobierno.

Está claro que los sectores del poder financiero que apuestan a la salida de Stuzzeneger e imponer a Prat Gay en su lugar, también son jugadores financieros pero con fuerte respaldo en la secretaria de hacienda de EE.UU. y el continentalista comando sur. Esta puja de poder recorre Suramérica, Latinoamérica, Hispanoamérica, no es una puja propia de la Argentina. La crisis en Perú, la de Honduras, la de Brasil, la de México, etc. lo muestran.

Frente a esta realidad cruda y dura, Macri opta por activar denuncias que son fuegos de artificio para que el poder mediático tenga balas para tapar el sol de la crisis de gobierno, por la interna financiera en el esquema de poder en el gobierno.

Hay un doble juego del gobierno para tapar el sol:

- Por un lado demonizar al Papa Francisco que visita a Perú y Chile, como ya lo hizo con Ecuador, Bolivia y Paraguay, pero no viene a la Argentina y no acepta recibir a Macri en privado; pero que sí recibe a los movimientos de trabajadores de la economía popular de Argentina y a la comunidad de pueblos originarios (mapuches) de la Patagonia. De este modo se pone en relación a los movimientos de la Patagonia suramericana, a todos los movimientos de trabajadores y productores que sufren la exclusión de los grandes poderes financieros invertidos y que ocupan la Patagonia suramericana.

- Por el otro, demonizar al movimiento de trabajadores argentinos para avanzar en la destrucción de su organización sindical y del sindicato como organización, porque si no puede imponerse frente al Banco Central si o si necesita hacerle pagar los costos a los trabajadores en general y para ello requiere destruir los sindicatos.

La política de destrucción de los sindicatos de trabajadores es una política del poder financiero internacional a partir de 1991. De considerarlos un actor necesario para sobrellevar la crisis de 1929 y guerras interimperialistas, a partir de 1991 los consideran un obstáculo para poder expandir el “libre juego” de los negocios financieros globales a todo el mundo. Esto es claro en EE.UU., en el Reino Unido, España, etc.

El Macrismo está en una crisis que se profundiza, en una crisis que se agrava y que no le encuentra la vuelta para hacérsela pagar a los intereses financieros globales. Por ello intenta hacérsela pagar a los Pueblos destruyendo sus organizaciones, pero estos no aceptan dócilmente pagar los platos rotos de la fiesta financiera. No lo aceptan en Argentina ni en toda Latinoamérica. Pero saben también que la organización, la paciencia y la unidad son fundamentales en Tiempos de Colera Financiera!!!

* Sociólogo y presidente del Centro de Investigaciones Políticas y Económicas (CIEPE)