Por Úrsula Asta, Cecilia García y María Laura Morales para Radio Gráfica.

Llegamos a Bariloche organizadas, como tantxs más. El destino, lejano para quienes habitamos la zona centro del país; caro, para los bolsillos de una identidad que nos une y que con el feminismo sindical tomamos como bandera: “trabajadoras somos todas”. Fue la organización y la voluntad colectiva de asistir lo que permitió, a fuerza de muchas durante varios meses, llegar en octubre a la ciudad que es un centro turístico de nuestra hermosa Argentina.

El 36 Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Travestis, Trans, Bisexuales e Identidades No Binarias, nombre adoptado hace pocos años tras varios debates, tuvo como destino esta ciudad porque hace un año, en un violento desalojo en una comunidad mapuche en Villa Mascardi, siete mujeres, dos de ellas con sus hijos en período de lactancia y una embarazada de 40 semanas, fueron detenidas y trasladadas desde Río Negro al Penal de Ezeiza, en Buenos Aires, violándose instancias del debido proceso y humanas.

Como marca identitaria argentina, el Encuentro de Mujeres nació en 1986 y se configuró, con los años, como una experiencia única en el mundo. Esta cumbre ha recorrido distintos lugares, transformándose en una ámbito federal y masivo; con apertura, talleres temáticos, enorme marcha y cierre en el que se define cuál será el destino del año próximo.

La comisión organizadora está siempre a cargo de las locales, es decir, quienes en cada provincia integran espacios organizados, son las encargadas de armar en su ciudad el encuentro. Puestos de salud, escuelas para dormir, espacios para la realización de los talleres, recorridos, mapas, viandas, están entre los elementos que permiten el desarrollo de tres días de encuentro.

Por fuera de eso, se han ido configurando instancias que prevalecen en el tiempo, hechos que ocurren en simultáneo a otras actividades, son ferias, representaciones artísticas, marcha contra los travesticidios, asambleas por sectores, o radio abierta, como las del Foro Argentino de Radios Comunitarias, entre muchísimas otras.

Las elecciones nacionales

Bariloche tuvo la particularidad de estar atravesada por la coyuntura electoral. A una semana de las elecciones generales y ante un panorama político incierto, el debate sobre el devenir de la Argentina y la necesidad de las definiciones sobre el voto se hizo presente, así como la misma campaña que incluyó la distribución de volantes partidarios.

El amplio consenso: votar en contra de La Libertad Avanza, y eso incluyó el nombre propio de Sergio Massa como opción mayoritaria para elegir en defensa propia y seguir, desde allí, un camino necesario de organización para una etapa que asoma difícil. La candidata Myriam Bregman, de la izquierda del FIT, estuvo en el encuentro y su espacio hizo lo propio sobre pedir el voto.

El bloque de unidad sindical también se encontró. Dentro de él, el sector de trabajadoras de prensa tuvo su propia asamblea. La quinta realizada en el marco de estos encuentros. Pero así como esa reunión, muchas organizaciones realizan hechos políticos sostenidos en el tiempo en los encuentros. Estos espacios propios resultan únicos para generar instancias de participación, ya que, entre otras cosas, permiten encontrarse con compañeras de distintas provincias.

Las trabajadoras de prensa

En la jornada del domingo, en la Plaza Belgrano, la quinta Asamblea Nacional de Prensa se realizó tomando mates, ubicadas en ronda, sentadas en el pasto, al sol que tímidamente calentaba el frío patagónico, rodeadas de banderas de los sindicatos de base de las provincias.

Las oradoras se detuvieron a reflexionar sobre las propuestas políticas que son consideradas como las que pueden acceder al gobierno: Sergio Massa y Javier Milei. Dentro de ese binomio se resaltó que La Libertad Avanza viene a quitar derechos adquiridos y Unión por la Patria, en cambio, posibilita un escenario de disputa para seguir construyendo.

La secretaria general de la Federación de Trabajadores de Prensa, Carla Gaudensi, abrió el debate. Siguió la secretaria general del Cispren de Córdoba, Mariana Mandakovic. Ambas destacaron el rol de la organización. “La deuda nos somete, no hay país soberano con políticas de ajuste, sabemos que la disputa se puede dar en escenarios distintos, la lucha está en la calle y en la variante digital. Hay que salir con posiciones claras”, dijo la cordobeza.

Gabriela Barcaglioni, secretaria de Género del Siprebo de Buenos Aires, consideró que, ante este escenario de avance reaccionario, la salida es colectiva. “Todas queremos mejorar las condiciones laborales. Hay que hacer que la Ley de Equidad de Medios sea una realidad”, dijo.

Por el Sitrapren de Bariloche, Soledad Maradona, después de dar la bienvenida, detalló cómo es la realidad de las trabajadoras de prensa en la ciudad: “Como todo el país estamos precarizadas, con multitareas y muchas desigualdades”. También desde la Asociación de Reporteros Gráficos aRGra y desde Télam Bariloche tomaron la palabra.

Por el sindicato gráfico de Córdoba, se realizaron aportes ya que las gráficas y las de prensa se juntaron en la misma asamblea. Subrayaron la importancia de sostener los espacios de encuentro y la obligación, como sindicalistas, de orientar a las compañeras sobre cuál es la opción política en estas elecciones de octubre. “Es con Massa, nos guste o no, porque en la calle podemos cambiar cosas, de lo contrario, vienen por todo y por los convenios colectivos de trabajo”, plantearon las gráficas.

Micaela Polak, secretaria de géneros de Sipreba de la Ciudad de Buenos Aires, celebró que en la fecha del día de la madre tantas hayan elegido estar debatiendo. Además añadió que los medios ponen todos los días en juego discusiones saldadas: “Sabemos que son 30 mil, que las vacunas son para salvarnos y que la tierra no es plana. Esto se combate con trabajadoras organizadas, con conciencia de clase, que es lo que nos hace estar hoy acá”.

Sandra Chaher, de Comunicación por la Igualdad y la Red Par, contó que desde su asociación civil, luego de debatir y analizar el contexto, sacaron una “campaña llamada ´vamos a darla vuelta´ para salir a buscar el voto”.

Así como trabajadoras de medios privados y de medios públicos, también lo hicieron las de los medios autogestivos. Desde Radio Gráfica evaluamos imperante seguir trabajando desde la organización en la Argentina que se viene, por más conquistas laborales y para robustecer las ya logradas, así como la importancia de discutir la distribución equitativa de la pauta publicitaria.

FM La Tribu, La Poderosa, entre muchas otras, tomaron la voz. Hubo quienes plantearon que se implemente la Ley Micaela para medios de comunicación, otras remarcaron que hay que seguir trabajando por la plena implementación del cupo laboral travesti trans.

Los talleres

Uno de los espacios estructurantes de los encuentros son los talleres. Hubo más de 100 propuestas, muchas de las cuales se desdoblaron en varias comisiones. Son instancias de intercambio, gestación de ideas que en ocasiones devienen luego en leyes (como la ESI y la ley contra la violencia obstétrica) y lugares en los que se construye militancia, como la Campaña por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.

Durante la tarde del sábado y la mañana y tarde del domingo, se depliegan los talleres realizados en escuelas o universidades. Eso culmina con la redacción de conclusiones de lo debatido y después se incorporan al documento final.

Los talleres estuvieron atravesados por el debate de la elaboración de estrategias de forma creativa y militante por parte de los feminismos ante los discursos de odio, y se discutió cómo dar esa pelea para no dejar que nuestras vidas se pongan en riesgo ante la precarización que ésta realidad supone.

Así como muchos otros, por ejemplo, fue el segundo año consecutivo que se abrió el taller de “identidades marrones”, que incluyó testimonios sobre experiencias de violencias, relatos que permiten tomar una dimensión colectiva que potencia la acción para visibilizar los racismos en un país que muchas veces niega sus raíces originarias.

La marcha, dos realidades

El domingo por la tarde fuimos hasta el “alto” de Bariloche. Allí donde las construcciones turísticas y los comercios de productos regionales desaparecen, donde el frío es más frío y donde el dinero que dejan las pistas de esquí y los chocolates deliciosos no parecen ser parte de la vida cotidiana. Dos Bariloches. El centro y la periferia. El de piel protegida y el de piel curtida.

La gran marcha, que se estima en la participación de más de 70 mil personas, recorrió estas calles. Entre paisajes de montañas, con subidas y bajadas, y los cuerpos con sus colores, maquillajes, pañuelos, bengalas y flameadoras, transitó casi 5 kilómetros entrelazándose con vecinas y vecinos que salieron a la calle a saludar, a sacar fotos o que lo hicieron con curiosidad.

“¿Ya estará por pasar la marcha por acá?”, escuchamos decir a unas vecinas desde la puerta de su casa para observar la movilización. Esperaban en una calle aledaña por la que el recorrido no tenía previsto hacer su paso. A diferencia de lo que en ocasiones se pretende mostrar, popularmente el recibimiento no es con apatía.

Las imágenes, que con emoción vislumbramos, cobijan los rostros de quienes salieron con sus propias banderas a visibilizar sus luchas. “Fue gatillo fácil, fue la Polícía”, decía una tela que dos vecinos salieron a levantar en la puerta de su casa con el rostro de un niño. Una compañera con megáfono se acercó rápido al verlos para leer las inscripciones y toda esa cuadra de la enorme caravana acompañó estremecida los rostros llorosos de esos dos hombres de piel curtida que agradecieron con la mirada. Se improvisó el cántico: “Yo sabía, yo sabía, que a Diego lo mató la Policía”.

Rumbo a Jujuy

Con la sensación atravesada por varias sobre que “a Jujuy estamos llegando tarde”, la provincia del Norte de nuestro país se convirtió en la sede de lo que será el 37 Encuentro en 2024.

Desde el inicio, con la participación de una delegación del Malón de la Paz, que llegó desde Jujuy hasta la Ciudad de Buenos Aires hace meses atrás y que acampa en las puertas de Tribunales y frente el Congreso para exigir una intervención federal en la provincia, pero esta vez en Bariloche, se hacía fuerza para que sea esa provincia el próximo lugar a visitar.

“Jujuy es Milagro”, se tejía por abajo. Presa política desde el 2016, bajo la política del gobernador Gerardo Morales y de Mauricio Macri a nivel nacional, la continuidad de la detención de la lideresa jujeña es símbolo de aquello que no hemos podido construir como campo popular.

En un lugar atravesado por la creciente violencia a la resistencia social contra la reforma constitucional, la situación de Milagro Sala empeora con cada día que pasa.

Más allá de lo que imponga la coyuntura tornasolada que nos toca atravesar, el Encuentro viajará del Sur al Norte para poner pie en la tierra de los valles, las yungas, la quebrada y la puna.

*Periodistas de Radio Gráfica. // Foto de portada: Laura Dalto/aRGra // Fotos interior de nota: Cecilia García /Radio Gráfica