Dos informes elaborados en forma reciente por el Centro de Investigaciones y Formación de la República Argentina (CIFRA) de la CTA reflejan el nítido contraste que exhibe la dinámica económica de nuestro país. Mientra se crea empleo, el salario se deteriora a merced de un ciclo inflacionario que deja ganadores sobre el terreno, el sector empresario.

El informe mas reciente, sobre movilidad del empleo en la Argentina, marca que “Entre los primeros trimestres de 2020 y de 2023 se generaron en términos netos 1,5 millones de puestos de trabajo, de los cuales el 37,7% son asalariados registrados, mientras que el 39,2% son asalariados no registrados y el 23,1% son no asalariados. La industria fue el sector que más empleo generó: con 357.300 nuevos puestos netos.”  Lo que evidencia y cuantifica que la dinámica económica fue generando conidiciones de inccorporación productiva en el país.

Las dos contracaras de esta ventaja, están concadenadas y a la vista. La primera se exhibe por el estancamiento salarial.

“Dado que los precios de los alimentos y bebidas crecieron más fuertemente que los precios en general, si se mide el poder de compra de alimentos del salario registrado se verifica una caída de casi el 8% entre diciembre de 2019 y junio de 2023. Este salario medido en alimentos resulta 25% menor que el de diciembre de 2015. El aumento general de precios observado tras la devaluación de agosto, que alcanzó el 12,4% en ese mes y se dio con un incremento en precios de alimentos de 15,6% empeora esta situación” señala el informe de coyuntura de CIFRA.

El deterioro acumulado de los tiempos de Macri, sumado al estancamiento y retroceso registrado en éstos cuatro años, marcan la dimensión de la crisis en los ingresos populares y los salarios registrados en nuestro país.

Compensaciones que no alcanzan

“Como medida compensatoria, el gobierno dispuso que se abone una suma fija de $30.000 en septiembre y otra suma equivalente en octubre, para aquellas personas con salarios netos inferiores a $400.000. Una simulación de su impacto indica que sólo para el 50% de las personas asalariadas que menos ganan esta suma compensaría el aumento de precios del mes de agosto y sólo para el 25% que menos gana podría llegar a empatar la inflación de agosto y septiembre” sostienen desde CIFRA.

En materia de Tarjeta Alimentar, de AUH y Potenciar Trabajo, los aumentos no logran superar los 300 pesos por día por beneficiario, lo que exhibe la ineficacia como serio paliativo a la crisis inflacionaria expuesta en nuestro país.

“Sobre el cierre de este informe, se anunció un nuevo programa que busca recomponer ingresos familiares. En este caso se trata de una devolución de IVA, con un tope de $ 23.000 mensuales, para jubilados, beneficiarios de AUH, monotributistas y asalariados con ingresos bajos y medios. Este tipo de medidas son fundamentales para contrarrestar el efecto de la mayor inflación sobre los ingresos de los hogares y atenuar un nuevo salto en el nivel de pobreza” destacan desde  CIFRA, poniendo el acento en el acierto de la medida, aunque vale decirlo, el tope de reintegro sea magro en relación a los gastos que demandan la canasta básica para una porción importante de asalariados.

Ganadores y perdedores

“Uno de los principales mecanismos para impedir la recuperación salarial fue el elevado proceso inflacionario y el esquema de “ganadores y perdedores” que tendió a consolidar la nueva estructura de precios relativos. Una forma de aproximarse a esta cuestión consiste en contrastar los precios de las ramas altamente concentradas con el IPC, distinguiendo aquellas en las que predominan los grupos económicos cuya integración vertical en sus cadenas productivas refuerzan su ventaja relativa en escenarios de alta inflación” destaca en su informe de Septiembre CIFRA.

“Arcor y Molinos Río de la Plata registraron un margen de ganancia en torno al 10-15% durante el año pasado y en lo que va del presente. Se trata de niveles muy superiores a los registros del período 2015-2017 (2,7% y 0,9%) y a las pérdidas contables que declararon durante la crisis que tuvo lugar en el bienio 2018-2019” señalan en el análisis de los que ganaran durante éstos años como consecuencia de la inflación.

Al analizar la transferencia de ingresos y la responsabilidad de los grupos económicos en ello, el número se exhibe contundente: “Entre 2017 y el primer trimestre de 2023, la transferencia de ingresos del trabajo al capital alcanzó a 101.400 millones de dólares al tipo de cambio oficial. Al tipo de cambio paralelo esa transferencia fue de 54.100 millones de dólares” señalan.